Cuando ingerimos cerveza, el hígado tiene que ponerse a trabajar intensamente para desintoxicarse del alcohol por lo cual no logra procesar todas las demás comidas que se ingieren al mismo tiempo. Ya que, la realidad es que, al consumir cerveza es muy común que también comamos quizá alguna botana (rica en grasa), cacahuates (ricos en grasas), unos tacos (ricos en grasas) y un largo etcétera (todos ricos en grasas).
Así, el hígado se “desentiende” de todos esos otros alimentos y se concentra en el alcohol, que es lo que más lo intoxica, dejando la digestión de grasas para después. Pero para cuando termina este proceso, las grasas ya se instalaron en el cuerpo, específicamente en el abdomen, y llegan para quedarse.
Recuerda que después de los 35 años, el metabolismo de los hombres se hace más lento y las grasas se digieren menos. No olvidemos que la cerveza tiene un alto índice glicémico. Eso significa que hace que se disparen los niveles de glucosa e insulina en el cuerpo, además del alto aporte calórico que representa, incluso aquellas que están etiquetadas como light.
Lo que podemos hacer es, consumir responsablemente, cuidar nuestra salud, y en caso de echarnos una cervecita, evitar acompañarla con otros alimentos altos en grasa. Tal vez preferir botanas frescas como pepinos, apios y zanahorias. Y entre una y otra cerveza, consumir un vaso de agua para ayudarle al hígado a llevar a cabo su proceso de desintoxicación.
Ten presente que para eliminar esa comida almacenada, tienes que ir al baño. La fibra soluble e insoluble ayuda a que deseches el sobrepeso de materia fecal, y evitar así padezcas alguna enfermedad cardiaca o cancerígena por la cantidad de toxinas guardadas en tu colon.
Mejora tu salud. Obra bien.
Más info en: www.marukaps.com.
(044) 5555096172
(0155) 65833373
dirección@marukaps.com.mx
No hay comentarios.:
Publicar un comentario